Ya son como del pasado ,en trochas anchas con coches morados y letras amarillas ,indicando la empresa y número de coches ,era muy real de la época del romanticismo ferroviario, donde la máquina que tiraba su convoy era poderosa e imponente, como un dinosaurio metálico indestructible. Que tiempos aquellos del boleto de cartón piedra ,la pilsen ,los panes con palta y jamón, las bebidas y golosinas y que al final, el viaje se transformaba en un picnic sobre ruedas metálicas ¡que maravilla y deliciosos viajes en tren!. Hoy todo es tecnológico, trenes de última generación con tecnología de punta , boletos electrónicos, alimentos industrializados y bebidas light ,todo autorizado y certificado por la autoridad sanitaria ,para protección y seguridad de nuestros cuerpos transgénicos ,de tantos saborizantes ,emulsiones ,sacarinas y endulzantes ,como también de carnes rojas y blancas llenas de hormonas, desconocidas para nuestro entendimiento. Pero el tren seguirá siendo el tren ,sobre las mismas trochas de acero de antaño, pero con poco movimiento oscilatorio del pasado romántico.....O.I.G.J.
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